Creo que Demi Lovato, la actriz y cantante salida de la factoría Disney, estaba entre las víctimas del famoso The Fappening, aunque nunca se llegó a confirmar si aquellos topless de cara cortada eran de verdad suyos o no. Ahora sí que no hay duda: la sesión fotográfica con Vanity Fair que acaba de hacerse pública nos descubre dos sorpresas agradables: la primera, que nadie esperaría de Demi una serie de fotos donde claramente prescinde de maquillaje y de edición posterior o retoque fotográfico; y la segunda, que tiene un culo mucho más que respetable.
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